Cómo: Sentados en el suelo, cruzamos una pierna sobre otra:
- Movemos el tobillo con las manos haciendo circunferencias en uno y otro sentido.
- Sentados en el suelo, oponer resistencia con la mano sobre los movimientos laterales del tobillo.
De pie, con la piernas rígidas. Balancear el cuerpo sobre los tobillos, desde los dedos del pie, hasta el talón. Se puede realizar el ejercicio con los pies juntos, o con movimientos alternativos de pies.
Efectos: Calentamiento de los tobillos y pies. En el último caso, se consigue adicionalmente el estiramiento de los gemelos.
Observaciones: El mal calentamiento de tobillos, lleva a menudo a esguinces y otras lesiones típicas de esta articulación.
En cuanto a la intensidad se refiere, el primer ejercicio propuesto es el menos intenso, frente al tercero.
Se puede aumentar la intensidad, subiendo y bajando sobre una única pierna en el caso del ejercicio 3.
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